En diálogo con
esta Agencia, Oertlin manifestó que “la realidad nos muestra que Entre
Ríos es la que menos caminos asfaltados o afirmados tiene, a lo que se suman
las características del suelo entrerriano y su composición que, a
diferencia de otros lugares, dificulta su mantenimiento, y por lo tanto, el
estado de las vías de comunicación”.
El dirigente
admitió que “aunque en el último tiempo se ha dado una circunstancia muy
especial, con lluvias continuas e impropias de la finalización de la temporada
invernal, y aunque 2011 fue un año de sequías, el fenómeno actual demuestra que
no se efectuaron las obras básicas necesarias para el sostenimiento de la red
vial”.
En la
actualidad, sobreviven trazados del año 1900, pensados para carros
de 1.500 kilos o vehículos de 2000 o 3000 kilogramos, mientras que hoy
transitan por esos lugares camiones con 30 toneladas. “Ese desfasaje indica el
atraso que experimenta la provincia entre su producción y su infraestructura
vial, en particular, en las zonas rurales internas, donde ni las rutas ni los
caminos enripiados gozan del mantenimiento apropiado”, cuestionó el titular de
Fedeco.
Oertlin,
ingeniero agrónomo de profesión, se preguntó: “¿qué explotación puede realizar
un pequeño productor que no tiene un camino adecuado para su emprendimiento,
sea éste un tambo, cría de porcinos, avicultura u horticultura”. “El Estado
de los caminos rurales no está a la altura del crecimiento agropecuario en la
provincia y esta realidad va en perjuicio de los productores, que son los
que aportan a la economía provincial y nacional, porque con la recaudación que
obtiene el gobierno los caminos tendrían que estar en óptimas condiciones”,
aseveró.FUENTE: AIM DIGITAL